En Venezuela se lleva a cabo de manera ininterrumpida desde el año 1998 cuando se creó la primera unidad de braquiterapia en el Urológico San Román, desde entonces cientos de pacientes se han beneficiado de esta poco conocida terapia que cumple de manera certera con un principio básico de la medicina: Ofrecer la mejor opción de curación con el menor daño colateral.