Es una cirugía usada para remover cálculos renales de gran tamaño, con altas posibilidades de fracaso si se tratan por Litotricia Extracorpórea. En su espalda harán una pequeña incisión (corte). A través de esta incisión, introducirán un nefroscopio hasta llegar al riñón y cerca del cálculo. El nefroscopio es un tubo largo equipado con un lente de aumento y una luz en el extremo. Los médicos pueden usar rayos X o ultrasonido para guiar el nefroscopio hasta cerca del cálculo renal. El nefroscopio y otros instrumentos son usados para extraer el cálculo cuidadosamente. Un aparato conocido como litotriptor o ultrasonido pueden ser usados para destruir los cálculos y convertirlos en pedazos más pequeños. La incisión será cerrada con puntos (hilo) o con steri-strips (cintas o tiritas adhesivas). Después de la cirugía, usted permanecerá hospitalizado durante dos a cinco días.
Siempre existen riesgos al practicar la cirugía. Usted podría contraer una infección o sangrar más de lo usual. Si sangra excesivamente, usted podría necesitar una transfusión de sangre. También podría tener dificultad para respirar o formar coágulos de sangre. Algunos órganos, como el hígado, pulmones y bazo, podrían resultar lesionados durante la cirugía. Podrían formarse adherencias (cicatrices) en el sitio donde estaba el cálculo. Es posible que los médicos no puedan remover su cálculo renal o usted puede necesitar más cirugías.